30 marzo 2010

Aparición

Y porque te has amarrado?

Porque me duele volar.


Hoy es mi quinta lección de vuelo, esa es la forma Correcta de volar, así no duele...


Yo no siento que vuelo, solo siento que caigo
en tí.

Cada vez aprendo mas nudos.

29 marzo 2010

Que acaso no me ves?

Para que quieres que te vea.....
Si te siento con todo el cuerpo...

28 marzo 2010

fuga

Y regreso antes del tiempo,
En donde solo estoy yo (y mis abundantes voces)

En donde se maximizan las imágenes
En donde aumentan las necesidades

Que ganas tengo de abrazarte...
Que ganas tengo de saber a que...

Aqui todo es creación.
Aqui todo es ritual.

Las posibilidades son cuasi-infinitas
la energía parece inagotable
no existen consecuencias ni margen de error
Tanto por hacer que mejor opto por no hacer nada..

la jodida prisa, la jodida espera

Respira, eso tranquiliza....

21 marzo 2010

Experimento 1: expresar el pensar

He pasado tanto tiempo pensando en hacer esto...

Así como he pasado tanto tiempo pensando en hacer muchas otras cosas....

Demonios!!!, otra vez llego este sentimiento que me impide expresar ya sea de forma verbal o escrita lo que pienso... Se asemeja al mecanismo de los cinturones de seguridad, cuando uno quiere avanzar rapidamente un sistema mecánico bloquea el cinturon y no lo deja recorrerse mas, entonces uno se tiene que regresar hacia el asiento y avanzar lentamente de nuevo hacia adelante.
En el instante en el que uno se precipita a avanzar, el cinturon no existe, lo olvidamos por completo, solo lo recordamos cuando éste nos frena. Asi es esto del pensamiento, (o al menos de mi pensamiento) esta todo el dia fluyendo, no para, a veces cosas que me agradan y a veces cosas que me desagradan pero siempre fluido. Luego surge ese deseo o necesidad de expresar ya sea de forma verbal o escrita, ese pensamiento que ha estado merodeando en ese no-lugar cuatridimensional llamado consciencia, y es cuando ese sistema no-mecanico (como el de los cinturones) que antes no existía, aparece frenando ese flujo de pensamiento aparentemente estructurado y ordenado. Aparece con la palabra, aparece con el Otro, aparece con la palabra que escucha y lee el Otro, la palabra me frena, la palabra me aterra. El Otro también. Pero que pensamiento existiría sin la palabra? Que Otro existiría sin pensamiento?

Ya con el sistema activado, sigo intentando por instantes (es decir, por un conjunto interconectado de sucesos atemporales) avanzar hacia delante, ¡en que cabeza cabe! Me resisto a regresar, no quiero desacelerar ese flujo continuo ¡Tan estructurado y ordenado de pensamientos!! Ja Ja, Como si pudiera poseerlos, transmitirlos o repetirlos. Tantos pensamientos que he tenido y todavia no aprendo que estos son impermanentes, efímeros, fugaces, irrepetibles.... Acá dentro (o talvez afuera) todo parece tan genial!!

Cuando ya acepto que definitivamente es necesario retroceder un poco para disminuir esta corriente interminable, surge el caos... El pensar se vuelve tautológico, ya no se fluye en el pensamiento, ahora se piensa para decir, se piensa para saber que decir y poder ser escuchado, se piensa en las multiples formas en las que el discurso puede ser entendido por la persona que escucha, en un supuesto intento por saber pensar como la otra persona, en un supuesto intento por entender -me?- (lo que allá dentro ya está supuestamente entendido) a través de esa otra persona.

Y estando de nuevo recargado en el asiento para emprender una vez mas el avance, ese pensamiento que fué, ya nunca mas será , ahora se ha convertido en palabras, las cuales serán entendidas en formas muy variadas, pero nunca como fue pensado en esa fractura dimensional del espacio-tiempo que generalmente nombramos consciencia. Asi pues, en un intento por avanzar escribo, para materializar, o en este caso virtualizar a eso que llamo pensamiento. No espero que nadie me entienda, que sería lo mismo que todos me entiendan, asi que cualquier tipo de comentario, crítica o sugerencia, sera leído cuidadosamente por mi y despues de una evaluación objetiva (esta palabra es muy delicada pero no me interesa en estos momentos debatir sobre la ausencia de dicotomias), es decir, tratando de hacer mi vanidad a un lado (que probablemente será complicado, pero me comprometo a intentarlo) lo aceptaré y en algunas ocasiones lo responderé.

Con gusto y en ocasiones no con tanto, pero eso si, siempre sincero: Yo y otros tantos yoes.